El gobierno fracasó hoy en su intento de avanzar con la privatización de Aerolíneas Argentinas luego de que los bloques de La Libertad Avanza y aliados como PRO y CC no consiguieran dar despacho favorable a alguno de los dos proyectos que plantean esa iniciativa en un plenario de las comisiones de Transporte y Presupuesto en la cámara de Diputados.
El debate en el plenario se dio con la presencia de funcionarios del gobierno –el vicejefe de Gabinete, José Rolandi y el secretario de Transporte, Flavio Mogetta- que defendieron la iniciativa, y con la oposición de los gremios del sector –pilotos, aeronaveantes, personal de apoyo en tierra- que se movilizaron al Congreso para manifestar su rechazo.
Durante el plenario, los funcionarios de Javier Milei cuestionaron el déficit de la empresa, la compararon con el régimen absolutista del rey francés Luis XIV y hablaron de un “despilfarro” de recursos. Sobre el conflicto gremial que atraviesa el sector, acusaron de “delincuentes” a una porción de los trabajadores que hacen huelga, lo que generó fuertes cruces.
En el encuentro se empezaron a debatir dos iniciativas que buscan declarar a la empresa “sujeta a privatización”, algo que preveía la Ley Bases pero que, a instancias de un sector de la oposición en el Senado, se quitó. La presidenta del plenario, Pamela Verasay (UCR), anticipó que los miembros de la comisión podrán sugerir nuevos invitados hasta el viernes a la tarde.
El diputado de Unión por la Patria (UxP) y secretario general de la CTA, Hugo Yasky, propuso que en la próxima cumbre se convoquen a los representantes de los sindicatos en conflicto. “Asumamos el compromiso de gestar una mediación para actuar en el conflicto que ustedes sistemáticamente decidieron que tiene que seguir abierto”, exigió a los funcionarios presentes.
Tras una primera explicación de los proyectos por parte de sus autores, Hernán Lombardi, de Pro, y Juan Manuel López, de la Coalición Cívica, disertó Rolandi. El funcionario defendió la privatización de la aerolínea de bandera, criticó en duros términos la administración actual y habló de dos ejes: el “déficit de la compañía” y “el avasallamiento de su dirigencia”.
Los gremios, por su parte, insisten que el conflicto que llevan adelante es salarial y aseguran que el Gobierno no hace una oferta de aumento de sueldos para generar los paros que le permitan justificar, ante la opinión pública, la iniciativa privatizadora.